Búscame

Búscame en la senda

de mis huellas marcada,

donde mis pies,

de caminante incansable,

pisaron con torpeza

y constancia,

donde el verdor de los pinos

con el cielo contrasta,

donde la escarcha

blanquea el alba,

de praderas y frutales

de trigales y alfalfas,

donde el azul del mar

destella esmeraldas,

donde lagos

de infinita calma,

reflejan arboledas

peñascos y ramas,

donde después

de la lluvia,

el sol pinta el cielo

entre nubes doradas,

de magenta y azules

de violeta y naranjas,

donde se cruzan ríos

de cristalinas aguas,

deslizándose alegres

entre montañas,

donde la paz te atrapa

y los silencios hablan.

Búscame allí, en lo más alto,

en la cumbre alcanzada,

donde la pureza te invade,

donde el viento te abraza,

donde recuperas sueños,

donde no eres nada.

Cuando halles mi cuerpo

inerte y tranquilo,

cierra mis ojos,

llévame al valle

donde empezó mi tiempo,

y recuéstame

donde la hierba nace,

que quiero ser flor, raíz y pasto,

que quiero ser tierra y arena,

que quiero ser campo.

(Roser Gómez)